España sigue atrayendo a los franceses, así como al resto de europeos, que vienen aquí no solo a pasar sus vacaciones. Aunque el mercado inmobiliario español atravesó una importante crisis entre 2008 y 2013, desde hace más de dos años se ha producido un auténtico repunte. Tanto los propietarios como los inversores acuden de nuevo a la Costa Brava para comprar pisos, casas, masías y otras villas a precios muy atractivos. El mercado inmobiliario tiende a estabilizarse.
¿Quién compra en España?
El clima, el entorno y el coste de la vida contribuyen a hacer de esta región española uno de los destinos favoritos de Francia, atrayendo tanto a turistas como a residentes de todo el año. Entre ellos, un gran número de jubilados que vienen a disfrutar de un coste de la vida mucho más bajo que en Francia. Muchos inversores también aprovechan la estabilización del mercado inmobiliario español para realizar inversiones de alquiler muy atractivas.
En los últimos años también han surgido en España numerosas promociones de obra nueva, sobre todo en la Costa Brava. Las casas y pisos nuevos resultan atractivos por todas las ventajas que ofrecen, sobre todo en términos de confort, eficiencia energética y plusvalías.
Inversiones de alquiler en la Costa Brava
Aunque los precios de la vivienda empiezan a subir en España, sobre todo en la Costa Brava, siguen siendo muy inferiores a los de Francia. Comprar un piso en Barcelona puede costar hasta 3 veces menos que hacerlo en París.
Las propiedades de lujo también están en alza en Cataluña. Inversores extranjeros adinerados compran villas de alta gama en la Costa Brava. Alquiladas, estas villas ofrecen a sus propietarios una excelente rentabilidad.
Poder adquisitivo de la vivienda en España
La reactivación del mercado inmobiliario español también se ha visto favorecida por la reducción de los trámites administrativos que conlleva la compra de una vivienda. El poder adquisitivo inmobiliario ha aumentado un 87 % en España desde 2008, frente al 29 % en Francia, según un estudio sobre el poder adquisitivo inmobiliario en Europa realizado por Crédit Foncier. Como en gran parte de Europa, los tipos de interés de los préstamos han caído bruscamente hasta situarse por debajo del 2% en 2016. Hace diez años, superaban el 5%.
Ahora es posible comprar una casa o un piso espacioso en la Costa Brava por un precio que parece irrisorio en comparación con el mercado francés. Los compradores pueden pedir un préstamo un 30% más caro que hace diez años. Mientras tanto, los precios de los inmuebles en el mercado tienden a estabilizarse.
Se ha producido un ligerísimo aumento, estimado en un 1%, tras una larga caída en la que los precios descendieron un 26%.
Aunque la inversión en propiedades de lujo está contribuyendo a hacer subir los precios, sobre todo en las localidades costeras, sigue siendo muy atractivocomprar una casa o un piso en la Costa Brava, tanto si se quiere vivir allí todo el año como si se quiere convertir en una segunda residencia o invertir en propiedades de alquiler.